Top de los mejores Restaurantes Originales y secretos En Madrid

La capital de España es privilegiada de tener una infinidad de establecimientos gastronómicos, pero en esta ocasión, conocerás los Restaurantes Originales en Madrid, aquellos que despuntan por sus aires clandestinos y extravagantes.

Madrid tiene para ofrecer amplia cantidad de experiencias, capaces de fascinar a cualquier turista que decida aventurarse en sus exquisitos bulevares. Está dividido en tres sectores desde un punto de vista urbanístico: Su casco antiguo, el ensanche del siglo XLX (donde se localiza el barrio de Salamanca) y sus barrios periféricos.

Sus vías más transitadas son los paseos de la Castellana, el Prado y Recoletos, y las plazas más frecuentadas encontrarás Cibeles, la Puerta del Sol, Mayor y de la Villa.

Sus museos de arte, ciencia e industria, su arquitectura antigua europea y monumentos históricos son sus principales atractivos. Sin embargo, su variedad gastronómica no se queda atrás, y podemos valorarla en los distintos restaurantes de la capital española.

Conoce los mejores restaurantes originales y secretos en Madrid

En esta oportunidad, pondremos a tu alcance los locales que no debes dejar de visitar sí este es tu destino. Es necesario que sepas también que cada uno de ellos, tienen su lugar en esta lista, no solo por su exclusividad, sino por ser poco conocidos, lo que les brinda un aura íntima. También te sorprenderás con otros que llaman la atención por la particularidad de sus conceptos.

Al igual que los antiguos “Speakeasy” de los años 20, en los que se expendían licores de manera ilegal, durante la ‘Prohibición’ en Estados Unidos y Canadá, algunos de estos locales están escondidos y regados por distintos rincones de la ciudad. Aunque claro, sí cumplen totalmente con sus respectivos parámetros legales.

WelkhomeClub

Como ellos mismos lo confirman en su página oficial, es “un club exclusivo pero no excluyente”. Este espacio sofisticado y fresco, que recibe solo a mayores de 18, y se ubica en la calle Monte Esquinza, número 15, en el barrio Chamberrí. Puedes asistir sí un anfitrión te invita o sí vas directamente al club y obtienes una llave temporal, válida para un día.

Para brindar una sensación acogedora, se les designa a los asistentes una habitación para llevar a cabo sus tertulias. En el caso de tratarse de reuniones laborales, cuentan con todos los implementos necesarios para poner a la disposición de los ponentes y asistentes, sin mencionar que tienen más de 300 eventos, bajo su organización de experiencia a cuestas.

Para los que les dan prioridad a las barras de los locales, según La Vanguardia “su botellero está considerado como uno de los mejores de la ciudad” y cómo no, sí tienen licores de lugares recónditos y variados; que pueden ser mezclados con una sinfonía de elementos orgánicos, frutos y especias para degustar, según las preferencias del comensal.

A la hora de facturar la bebida, se le cobrará solo la cantidad de la botella que haya sido consumida, y se calculará con la ayuda de un peso. El precio de sus tragos oscila entre 7 y 13 euros por cada shot.

Su carta es un abanico de platillos gourmet que incluyen salmón, cachapas, vegetales, semillas y hortalizas frescas, con deliciosos aderezos; sándwiches variados y enrollados.

Misericordia The Club

Volvemos a los años 20´s y sus características tabernas escondidas. Este es el caso de Misericordia The Club que se ubica en la planta baja de una edificación antigua en la calle del Cid, en el barrio Recoletos de Salamanca.

Lo más llamativo de este local es su decoración: una larga escalera con paredes recubiertas de fotografías antiguas en blanco y negro superpuestas, muros de ladrillo visto casi descuidado, una pequeña cama donde tomar asiento, mientras pides un trago y elementos en madera que encajan perfecto con el ambiente rústico.

Un lugar perfecto para disfrutar de la vida nocturna madrileña, acompañado por los temas más actuales y bajo la luz tenue de unos focos de cine. Sin embargo, debes tener prisa, pues no permiten la entrada de más de 85 personas, para el confort de cada uno.

Taberna Bandido

Esta no está precisamente escondida como las anteriores, pero merecía un lugar entre los mejores restaurantes originales y secretos en Madrid por dos razones. La primera: En este local se encuentra la puerta secreta que te dirigirá al Club Misericordia; y la segunda: es un pre-despacho ideal por su variedad de tapas y platillos ibéricos

Verás desfilar entre las (apenas) 10 mesas que tiene el salón delicias con bacalao, calamares, lubinas; también carnes glaseadas, sopas, tortillas, empanadas y exquisitas conservas. Para finalizar con broche de oro, te ofrecerán postres clásicos de la capital como bastolillos de crema.

La Sociedad de los Herreros

También localizada en el transitado barrio de Chamberrí, La Sociedad de los Herreros tiene como bandera la exclusividad y discreción. Amueblado de una manera rústica con colores neutros y moderada iluminación, pero a su vez un estilo sobrio y elegante.

Está puesto a disposición de quien desee alquilarlo para la organización de eventos privados. Cuenta con dos plantas, y en general trabajan de la mano con el catering de Cocina Satélite, sin embargo, el organizador podrá contratar otro servicio sí lo prefiere.

Hemingway

Al igual que en los antiguos antros, en este, el terciopelo rojo y el animal print, bordeados de espejos por doquier, ambientan las noches. Cuenta con una espaciosa barra donde te regocijarás con cócteles de autor.

Más singular que cualquiera de los anteriores, la entrada hacia este la encontrarás en los baños, por lo que debes ser conocedor de la  calle Marqués de Casa Riera, 4 28014 para poder disfrutarlo. Cómo no iba a estar entre los mejores restaurantes originales y secretos en Madrid.

A de Arzabal

Se encuentra en la calle Antonio Acuña 19, 28009 y su horario es de 2:30 pm a 2:00 am. Su ambientación aislada de la luz natural, no te permitirá estar al tanto de las horas, por lo  mismo, te recomendamos olvidarte de ellas y disfrutar la experiencia.

Aunque su carta es variada y sencilla, su fuerte es la comida japonesa, y en el área de coctelería se defienden magníficamente con más de 40 cócteles, entre clásicos y de autoría. Sí prefieres champaña, podrás escoger entre más de un centenar de diversidades.

La entrada, de igual manera, también es exclusiva para socios, o para quienes hagan su reserva con antelación vía online. Su salón tiene capacidad limitada para 35 comensales, pero también cuenta con dos espacios privados para cuatro y doce personas, respectivamente.

La Jefa Home Bar

En el Paseo de Recoletos, en el barrio de Salamanca, y aunque no está justamente escondido, este rinconcito con vibras caribeñas te seducirá. Sus colores crema, buena iluminación, sofás y butacas cómodas te harán sentir en un sitio hogareño, sin mencionar que al llegar te harán un tour, como quien visita por primera vez la casa de un amigo.

Perfecta para reuniones familiares o entre amigos. Una escalera en el medio del lugar te conducirá a la planta baja, donde se conservan vinos de autor seleccionado nacional e internacionales.

Recetas con yuca, ají y papaya resaltan en su menú dejando clara la influencia latina, específicamente venezolana. Sin embargo elementos del sudeste asiático también dicen presente, como en el caso de la pasta wan tu.

No solo puedes organizar cenas o almuerzos. En La Jefa los desayunos juegan un papel importante y protagónico: panes ecológicos elaborados con masa madre, jugos y batidos hechos al momento. También los cócteles cuentan con maceraciones caseras realizadas por el barman encargado.

El Rincón Secreto de Salvador Bachiller

Recordando nuevamente el término ‘Speakeasy’ un gastrobar de ensueño, se encuentra camuflado por la tienda de maletas de Salvador Bachiller, en su planta baja, en la calle Alcalá 151.

Se abre paso entre los mejores restaurantes originales y secretos en Madrid gracias a su cantidad de opciones en bebidas con o sin alcohol llaman la atención de quienes se acercan a curiosear: zumos y batidos naturales, malteadas extra dulces e innumerables elecciones de cócteles tropicales, de autoría o clásicos.

Las plantas que decoran el lugar en combinación con sus acogedores muebles, nos recuerdan los clubes coloniales ingleses.

Kikeller

Caracterizado por tener una doble vida: Este local, que durante el día es utilizado como estudio y tienda de artículos decorativos, los fines de semana se vuelve uno de los bares más sonados de la ciudad. Se encuentra en la calle Corredera Baja de San Pablo, 17 28004.

Aunque es el lugar perfecto para calentar con unas cervezas, también tienen licores de marcas reconocidas y una variedad de entremeses para compartir. En la barra se encargaran de cobrarte según las chapas de las botellas que consumas, sí viene al caso.

Debes tener cuidado en no pasarte de copas, ya que corres el riesgo de querer comprar todas las bellezas que forman parte del mobiliario, que es entre retro, minimalista y futurista.

Palermo

Este local underground para quienes sienten afinidad por el género Rock and Roll, tiene casi tres décadas de haberse inaugurado, lo que le da un lugar de importancia por su antigüedad. Se sitúa en la calle Palermo 21, 28430.

Encontrarlo te puede dar un poco de trabajo, ya que está en un garaje de un chalet, pero al llegar y degustar algunos tragos y estar a tono con la música sabrás que valió la pena.

Yugo de Bunker

Solo para verdaderos amantes de la comida japonesa, recomendamos Yugo de Búnker en la calle San Blas, en el barrio de Las Letras. Al entrar te darás cuenta de que el nombre le va como anillo al dedo, ya que en su interior simula un búnker japonés durante la segunda guerra mundial.

El piso superior es para todos los públicos, pero si te vuelves socio, podrás tener acceso al piso inferior, donde se degustan platillos exclusivos y selectos de la gastronomía de Japón.

Una colección de máscaras japonesas forman parte del decorado, pero también te llevarás de recuerdo la degustación de alguno de sus tres menús denominados: Pureza, Mestizaje y Gastronómico.

Arquibar

Mayormente conocido por sus inmejorables brunch, la hospitalidad de quienes prestan servicio en él y la frescura de frutas. Este local con mobiliario vintage, está en Travesía Conde Duque. Incluye en su menú ensaladas, tostadas y platillos calientes, pero también distintos quesos y embutidos para picar y postres variados.

Sin embargo su acceso es difícil, ya que el espacio es limitado y la demanda es alta, lo que te recomendamos reservar con cierta antelación.

El Vagón de Beni

En Hoyo de Manzanares, este restaurant cuenta con una ambientación propia de una estación de trenes, que es capaz de trasladarte en el tiempo. Cuenta con dos vagones, amueblados como un restaurant de lujo antiguo, que los comensales abordaran para iniciar el recorrido por la carta.

Para llegar a los vagones no hay señalizaciones, por lo que tendrás que preguntar a los vecinos de la zona cómo alcanzarlos.

Quienes lo visitan quedan fascinados por el servicio y más aún, por la delicadeza con la que emplatan los encargados, cuidando cada detalle. Recalcan que volverían sin pensarlo y lo recomiendan con los ojos cerrados.

Salón de Fleurs

Sí hay una palabra que describe este local es ‘encantador’. Su decoración es femenina, clásica y elegante con aires ingleses. Siempre valdrá la pena degustar un delicioso café, té o infusiones (cuentan con gran variedad de estos), o probar alguno de los postres, como galletas o tartas que tienen para ofrecer, rodeado de flores como si de un cuento se tratase.

Si valoras el minimalismo, este lugar definitivamente es para ti.  Lo encontrarás en la calle Guzmán el Bueno, y es magnífico para reuniones pequeñas e intimas.

Muta

Ubicado en Ponzano, en el barrio de Chamberrí. Desde sus inicios, hace menos de una década, Muta ha buscado hacerle homenaje a su nombre, variando y modificando sus espacios y propuestas gastronómicas periódicamente, como lo designó la mente maestra detrás de este exitoso antro, Javier Bonet.

Los clientes al entrar redactarán su comanda en una máquina expendedora, y luego buscarán su encargo con el ticket. Podrán probar tapas y aperitivos variados detrás del mostrador, cual “tabernero”, y vivir una experiencia donde se rompen las clásicas reglas de los bares.

Su apariencia ha evolucionado innumerables veces desde su inicio, pero sigue manteniendo esa esencia de “trabajo en proceso” que a muchos les encantó al principio. También su carta muta: ha ofertado alimentos latinos, norteños, entre otros.

La contraseña

También en Ponzano, La Contraseña se hace lugar en la lista por su área “secreta” de la que solo pueden disfrutar algunos pocos, que saben de su existencia.

Cenas privadas y platillos de exclusividad son algunas de las mieles que incluye este espacio. Se llama “El Escondido” y simula una cámara acorazada, como las de los bancos. El acceso de nuevos miembros dependerá de la aprobación del Maitre.

Una curiosidad de este misterio: para llegar a él deberás atravesar la cocina y cruzar una sala con copias de los cuadros más robados a lo largo de la historia.

Juanita Cruz

Se halla en el Paseo de La Habana, posee el nombre de la primera torera de la historia. Está en un sótano que fue modificado y amueblado, ya que antiguamente fue la estación de metro de Chamartín, durante la postguerra.

Este bar cuenta con historia, ya que, para esa época era clandestino. Lo frecuentaban sus clientes, quienes salían hasta el amanecer del siguiente día. Hoy en día este espíritu se mantiene, así que sí deseas pasar una noche llena de baile y música en Madrid, este definitivamente será tu lugar.

Costello Club

La música en vivo es la protagonista de la escena en Costello Club. Está en la calle Caballero de Gracia, y cuenta con dos plantas y tres ambientes: Golden Lounge, donde está una barra para ordenar copas, White Lounge, en blanco y negro y Art Pop que complementan un área fresca para relajarse, y el Club, que viene siendo la parte más íntima y underground, situada en la planta baja.

Grupos de bandas alternativas ambientaran la noche con sus melodías, y también distintos Dj’s acompañarán la velada.

Warehouse

Un restaurant con decorados vintage en la Calle María de Molina, en el jardín de La Quinta Marqués de la Concordia, del barrio de Salamanca. Su más grande atractivo es una carta con innumerables vinos y productos ecológicos.

La hacienda Zorita, también es de sus propietarios, así que puedes estar seguro de que lo que degustes será totalmente fresco. Para complementar toda esta onda ecológica, Warehose tiene un diseño industrial y elementos en material reciclado.

El Sobrino de Botín

Muchos no tienen idea que en Madrid se encuentre el restaurant más antiguo del mundo. En La Latina está el Sobrino de Botín, que abrió sus puertas en 1725 y hasta el sol de hoy sigue prestando servicios. Escondido en la planta baja del número 17 de la Calle Cuchilleros, junto a la plaza Mayor.

Entre sus comensales estuvieron Hemingway y Truman Capote, y aunque ha pasado por distintos propietarios, se ha mantenido a lo largo de los años. El fuerte de su carta son los asados, cordero, almejas y otras carnes.

Hacer este recorrido por los mejores restaurantes originales y secretos en Madrid, ha sido sumamente placentero, y esperamos que te sea de gran utilidad cuando te aventures por las calles del casi centro de la península ibérica. Todos estos placeres en las cercanías del río Manzanares esperan por ti. Solo debes estar atento, ser muy discreto y saber buscar.